lunes, 16 de junio de 2014

La humildad es lo primero que se pierde

Lo lograste gracias a mi...

Hola, hoy me ocupa un tema no muy agradable a los que lo están viviendo.  Quizás sientas que estoy hablando de ti, pero, que bueno que no nos conocemos. Si fuera el caso de que nos conocemos un poco, tranquila/o, escribo de mis propias experiencias y de lo que veo y guardo en mi corazón. Sin embargo, en momentos dados escribo basada en que un día escuche a alguien decir: " ¿Por que nadie me aviso?,  debe haber un libro que hable sobre esto, etc...
Es un peligro en el matrimonio y en la vida creer que merecemos aplausos, agradecimientos, privilegios, etc... Si, lo merecemos. Quizá muchos no estén de acuerdo conmigo, pero, cada vez que hacemos algo que beneficia a nuestro cónyuge, cada vez que lo engrandecemos en conversaciones, que buscamos su gusto y bienestar merecemos algo, cada vez que lo hacemos excelente por los niños también esperamos algo. Pero lo esperamos de quien no debemos. Sacando el masoquismo, entiéndase, te complazco en todo porque eres mi esposo/a aunque me das puños y eres un malagradecido/a... NO, lo siento. No estoy hablando de eso. Con mucho respeto, usted amigo/a no perdió la humildad, usted se esta dejando humillar. (Cosa que Dios no quiere. Pero, ese es otro tema)
Regularmente uno da porque se siente amado, lo vemos en una amistad, en el sexo (al menos se supone que haya amor) lo vemos en muchos ámbitos. El problema esta cuando pensamos que hemos dado demasiado y nos merecemos un castillo o bombas y platillos... cuando miramos solo tenemos un día y una noche común. De momento damos lugar al orgullo.  Un grandioso día de estos donde la rutina diaria agobiaba mi existir, mi amado esposo me envió un email. Allí había solo un link, lo abrí días después, no le di importancia. Pero recuerdo que cuando lo abrí me impresione. Aquí te lo regalo: http://youtu.be/sMX3zlKp1y0 espero que cuando lo intentes lo puedas ver (que no este perdido el link) se titula "mujer invisible". Me arrojó mucha luz.

Pero, ahora quiero hablarte del peligro antes de saber la gran verdad sobre para quien trabajas y te esfuerzas. Cuando nos detenemos pensando en que merecemos mas de lo que recibimos nos mantenemos en el terreno aterrador del orgullo y es aquí donde la humildad abandona nuestro ser. Me dirás, estas equivocada YO SOY HUMILDE. JA!!!, si en algún momento dijiste: "que el me pida perdón, que ella sea la que me busque, no voy a regalarle porque no se lo merece, no ve lo que hago no lo haré mas,  y muchas otras expresiones como estas, quiero decirte que son indicadores de que estamos cobrando por nuestro trabajo y esfuerzo. Y mis disculpas, pero, aquí no hay humildad, sino, orgullo. Si para todos los problemas y situaciones difíciles llegara alguien a decirnos vas por mal camino y esto te puede llevar a esto otro, todo seria mas fácil.
Ahora te ofrezco la gran Verdad... mi fortaleza y base se encuentra en colosenses 3:23. Dice: "Y todo o que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres". (entiéndase hombre y mujer) partiendo de aquí, ¿de donde viene nuestra recompensa y aplauso? de Dios, ¿quien ve nuestro esfuerzo? Dios. Tu esfuerzo como padre cada vez que nadie te ve y estas solo con tus hijos, Dios lo ve y dará fruto. Mira que grandiosa verdad. Aun cuando alguien terrenal se comprometa a pagar por todo lo que haces, no sera suficiente.  Es que hay recompensas que no veremos con nuestros ojos. Me explico, por mas que se esfuerce el sembrador en tener todos los componentes en perfecto estado, necesita de Dios porque El es quien que da el crecimiento.  Lo dice la biblia en 1 Corintios 3:6-7, que alegría saber que El es justo. Si nos toca partir con el Señor antes de que los chiquitos crezcan, el mundo sera testigo de que alli se sembró bien. Todo porque Dios no olvida y El lo hará crecer. Si piensas que no estamos en el mismo tema, te recuerdo que tu alegría y la mía no viene de tu esposo/a, no viene de lo que logres obtener en la vida, no esta basada en lo que pierdas.... por lo tanto no puedes permitir que tus emociones determinen tus acciones. Pensé alguna vez "cuando me case voy a estar completa, cuando tenga la casa de mis sueños seré feliz" NO, nada de esto llena el corazón. Tu mayor aplauso, tu paz, tu mejor regalo es saber que lo hiciste para Dios y que El hará que valga el esfuerzo.
"Torre fuerte es el nombre de Jehová; A El correrá el justo, y sera levantado." prov. 18:10

jueves, 12 de junio de 2014

Nuestra hermosa casa

Todo comenzó hace unos meses atrás... 

Ya llevábamos 6 años de casados y nos dimos cuenta de que ya fuera por los compromisos de ambos o por la desorganización mía, la casa no se lograba poner al día. Tratábamos de caminar ignorando que esto nos creaba muchísimo estrés. Buscamos ayuda con nuestra Pastora. Ella nos hizo varias observaciones y recomendaciones. Todo lo llevamos a cabo. Fue de mucha bendición.  

Un grandioso día visitamos una librería Ruaj Hakodesh en el shopping Los Palacios y vi este fabuloso libro: "Se acabó el desorden" escrito por Sandra Felton y de ahí surge la grandiosa idea de hacer este blog. Me pareció genial que existen grupos anónimos de "ex-desordenadas" 

Conozco que puede ser vergonzoso reconocer que nos falta en esta área, sin embargo, no hay nada mejor que detectar el mal para corregirlo de manera efectiva. Ninguno de nosotros nacimos con un "job description" al menos no en este tiempo. Pero, es una realidad que se espera de la mujer de hoy que ademas de ser trabajadora y emprendedora, mantenga su casa en orden. Hay aquellas que lo disfrutan y no se les hizo difícil en ningún momento de su independencia o vida matrimonial, sin embargo, habemos otras muchas que necesitamos esta ayuda. Necesitamos saber que no somos las únicas que requieren mucha o poca AYUDA.... en unos detallitos. 

A mis hijos les encanta saber a donde nos dirigimos en el carro. Nunca le contesto a menos que vayamos a casa. Una noche le dije al menor: "Vamos a nuestra hermosa casa" y "WALA" el lo dice todo el tiempo.  ¿Vamos a nuestra hermosa casa? SIIIII, este la casa hermosa o desordenada es nuestra HERMOSA casa.  Por otro lado, tanto mi esposo como yo lo gozamos tanto que juntos tratamos de que sea una realidad.  

Todos queremos llegar siempre a NUESTRA HERMOSA CASA... 

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